Elaborado con leche cruda de oveja y trufa blanca del Piamonte italiano.
Con un periodo de maduración aproximado de 5 meses con las mejores condiciones atmosféricas, hace que se potencien todos los aromas a medida que el queso va perdiendo la humedad inicial de la elaboración.
El aporte de sabores y aromas propios del queso de oveja durante su periodo de maduración, junto con los que aporta la trufa confieren a este producto unas características únicas y exquisitas.